¿Qué somos?

¡Wildcats!

No, perdón. Te damos la bienvenida a SoundClash, un podcast musical con ínfulas de ser, además, un contenedor de las opiniones melómanas de un número indefinido de individuos.

Nacemos con el humilde objetivo de cubrir el vasto universo de la creación melódica, desde el día en el que Thomas Edison le cantó “Mary Had a Little Lamb” a un tubo entre electrocución y electrocución de elefantes, hasta hoy mismo.

“La apertura de miras es nuestro principal activo”, diríamos si estuviéramos saliendo a bolsa. Partimos de la base de que toda la música, aproximadamente, merece un espacio, siempre y cuando no abogue por cosas horripilantes. Las distinciones entre alta y baja cultura, entre artistas masives y de culto, nos la traen bastante al pairo: en nuestra casa, Camela y Cocteau Twins tendrán igualdad de oportunidades, que no necesariamente igualdad de valoraciones.

Entonces, ¿qué encontrarás aquí?

Una pregunta lícita, de respuesta incierta, pero que podemos intentar avanzar:

• Reseñas. A veces grandes cuando sintamos una especialidad afinidad por un álbum, pero más a menudo pequeñas pildoritas de opinión, recetadas por sus doctores de confianza.

• Listas. Tops con un tema común, o simples recopilaciones de cosas vagamente hiladas con alguna excusa barata. Quién sabe.

• Podcast. Los episodios de nuestro aclamado1 podcast SoundClash se subirán aquí también, porque para qué hacer spam en siete sitios diferentes si lo puedes hacer en ocho.

• Batallas. Ya que nos pusimos a hacer competir a artistas en el medio auditivo, podemos invadir también la palabra escrita.

• Notas al pie2. No más paréntesis cuando puedes mandar al lector en un viaje de ida y vuelta a una subtrama paralela que poco o nada tiene que ver con el meollo principal.

Si te hemos convencido, consulta tu correo electrónico; creo que hay un príncipe nigeriano que quiere algo. Además, si miras debajo de esta misma frase, verás un botón.

Teóricamente sirve para que puedas recibir notificaciones por email cuando se publique algo. Pero también es posible que estés dando consentimiento implícito a entregarnos a tu primer vástago. Opinamos que en la incertidumbre está la magia.

Poco más que añadir; en tus manos encomendamos nuestro espíritu. Hagas lo que hagas, gracias por venir.

Atentamente,

El equipo SoundClash.